Los sin sabores que ha traído consigo la pandemia son opacados, al menos para ocho familias, por la alegría de haber recibido las llaves de su nueva vivienda entre abril y mayo.

Silvia es una de las beneficiarias. Luego de anotarse a varios llamados, dejará de alquilar y comenzará a pagar su casa propia. "Cuando me llamaron de la Agencia y me dijeron 'saliste en último lugar'... ¡Fa! ¡Eso de no alquilar más es maravilloso!", expresa con satisfacción. Cuenta, además, que se mudará con su gato al barrio Tres Ombúes y que tiene "una amiga que vive en el mismo complejo hace tres años, así que estoy contenta, deseando mudarme".

Mónica, por su parte, salió favorecida en el primer llamado al que se inscribía, para una vivienda de un dormitorio en Cerrito de la Victoria. Si bien manifiesta no conocer el barrio, está contenta y ansiosa por mudarse y aprovecha la oportunidad para resaltar la atención brindada por parte de la Agencia Nacional de Vivienda (ANV). "Quiero agradecer por toda la amabilidad y seguimiento con los trámites, siempre recibí muy buena atención".

La zona oeste de Montevideo recibe, por último, a Stefani y a Gianni que se mudarán a una vivienda de dos dormitorios en Nuevo París. Ellos corrieron la misma suerte que Mónica, al salir sorteados en el primer llamado al que se inscribían. "Es la primera vez que nos anotamos y nos enteramos en las redes sociales. Entramos a mirar y juntamos todo lo que había que traer. Nos anotamos y estuvimos ansiosos, a la espera. Nos mudamos a Nuevo París con nuestra hija de tres años. Ya eligió el color de su cuarto: rosado", sonríe.

Ahora es el turno de la zona este de Montevideo, más precisamente de Malvín Norte, que recibirá a cinco nuevas familias. Lucía fue la primera en recibir las llaves de su vivienda de dos dormitorios. "Vivo allí desde los dos años, así que ya conozco los tips del barrio y a su gente". Cuenta que luego de anotarse a cuatro llamados, resultó beneficiaria. "Hace años que me vengo anotando y esta última vez salí seleccionada, al fin llegó el día", finaliza.

Daniela y Marcos corrieron mejor suerte, ya que resultaron favorecidos en el primer llamado al que se inscribían. "Nos enteramos por Facebook, entramos directo y ahí ya sabíamos cuál queríamos". Se mudarán a una vivienda de cuatro dormitorios con sus hijos.

La suerte también estuvo de lado de María José y su familia. "Es la primera vez que nos anotamos. Entré a la página a ver si había posibilidades y acá estamos", expresa. "Fue todo muy rápido, tuvimos mucha suerte. Estamos súper agradecidos porque nos atendieron siempre muy bien desde el primer día".
Serán sus vecinos María y Diego, que se mudarán a una vivienda de tres dormitorios en la zona.

Los últimos en recibir su vivienda en Malvín Norte fueron Alison y su pareja, que ya conocía el barrio a la perfección porque "mi mamá hace cuatro años también salió sorteada por acá y nos convenció y me anoté", cuenta la adjudicataria. "Salimos de casualidad, no lo teníamos planeado y la verdad que fue un término de 2020 pum para arriba". Incita a que las personas se inscriban a los llamados de vivienda que tiene la ANV porque "en algún momento, tarde o temprano, las cosas llegan".